Los seres humanos tienen tres molares en cada lado de la mandíbula y tres en cada lado del maxilar; tener uno de más (un diente supernumeraria) es algo muy raro. En poblaciones humanas actuales este hecho tiene una incidencia de un 0,1 a 3,4 por ciento. Pero el fenómeno viene de lejos. Un equipo de investigadores a hallado en Atapuerca un homínido de más de 4.000 años de antigüedad con un molar de más.
El hallazgo, recogido recientemente en 'Journal of Comparative Human Biology', se ha realizado sobre un hombre de unos 40 años de edad, de hace entre 4.760 y 4.200 años, localizado en el sepulcro colectivo conocido Cueva El Mirador, en Atapuerca. Además de la presencia de este cuarto molar, padecía también importantes enfermedades bucodentales.
Los expertos destacan que es la primera vez que se publica en una revista científica la existencia de este fenómeno en un homínido de poblaciones antiguas y es también el primer caso identificado en los yacimientos de Atapuerca.
La investigadora Marina Lozano, una de las firmantes del artículo, asegura que "en el caso de poblaciones arqueológicas hay muy pocos ejemplos estudiados y publicados de molares supernumerarios. Por lo tanto, es una novedad".